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Temporada 8 Al Aire - Episodio 2 No Rules Clan

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Tenemos que hablar del regreso del Festival In-Edit a Bogotá

  • Foto del escritor: Sudakas
    Sudakas
  • 23 abr
  • 4 Min. de lectura

El festival barcelonés de cine dedicado al documental musical vuelve a Bogotá después de años de ausencia y en su retorno hay una pregunta clave por la memoria y por el registro de esos momentos a menudo tan efímeros que ofrece la música.



Fue en 2013 cuando por primera vez aterrizó el In-Edit en Colombia, un festival de cine documental musical nacido en Barcelona y con ediciones en países como Argentina, Brasil, Alemania, México y Grecia, en el que se han presentado obras como The Filth and the Fury, un documental sobre el legendario grupo punk The Sex Pistols que sólo duró 26 meses y grabó un único disco, a pesar de lo cual revolucionaron completamente el panorama musical o 20.000 days on Earth, una película cuya narrativa gira alrededor de los dos papeles fundamentales en la vida de una enigmática figura del rock llamada Nick Cave, o incluso Gimme Shelter que aborda la historia detrás de una gira que hicieron los de Rolling Stones por los Estados Unidos en 1969, o Five years in the Making of an Icon: David Bowie, un retrato íntimo de cinco años claves en la vida de David Bowie. 


Durante un par de años en las salas del entonces Cine Tonalá y el espacio de Armando Records donde se llevaban a cabo las proyecciones, tuvimos la oportunidad de ver esos retratos íntimos, ese acceso privilegiado que solo tienen quienes logran captar ese instante efímero de un show, o la construcción de años de una historia o un disco que aborda un proceso de transformación. Todo eso de lo que no somos del todo conscientes nosotros los mortales que a duras penas logramos juntar todo el dinero para poder ver desde abajo y desde lejos a esas figuras que nos han acompañado en los momentos más complejos y cuya música nos ha servido para transitar esos momentos de dolor, frustración, goce, celebración y porqué no, amor infinito. 


La última edición que tuvimos en Bogotá del In-Edit en el 2017 presenciamos joyas como American Valhalla, el documental que acompaña desde la intimidad la unión del padrino del punk Iggy Pop, con Josh Homme, líder de Queens of the Stone Age, para la construcción de su disco Post Pop Depression, vimos a Residente embargarse en un ambicioso proyecto en solitario en búsqueda de su ADN y cuyo viaje a través del mundo nos mostró la búsqueda personal mientras deposita toda esa información en su primer disco como solista. Vimos obras locales como Busca por dentro de César Gálvis y Marino Aguado en el que hacen un homenaje al legado de Jairo Varela, director de uno de los grupos más grandes que ha parido la salsa colombiana, contado por sus seres queridos y aquellos con los que compartió parte de su vida. También Cañonazo Tropical de Felipe García Peña en el que se aborda la historia de nuestra joya de la corona: Discos Fuentes. En este documental se muestra la historia detrás de uno de los sellos más importantes de Colombia, su desarrollo, sus cañonazos bailables de cada diciembre, los músicos que hicieron parte de la época dorada del mítico espacio en el cual Colombia ha dejado marcada su historia en un archivo sonoro invaluable.


Todo esto, más allá de la excusa del Festival, del cual celebramos su regreso, nos hace preguntarnos también sobre nuestro diálogo con el pasado en momentos del mundo en los que la vida parece pasar frenéticamente por nuestras narices y por los dedos de deslizamos casi que por inercia en nuestros celulares en búsqueda de un algo que no sabemos que estábamos esperando hasta que aparece de momento a satisfacernos con videos de un minuto o menos que resuenan con nosotros mientras duran y son desechados al instante. Y es justo ahí donde surge la reflexión de la memoria, la pregunta de para qué documentar obsesivamente todo en momentos donde nuestra relación con el contenido que consumimos ha perdido tanta relevancia y se ha convertido en un acto de matar el tiempo que siempre nos culpamos de no tener. 


Esta edición de In-Edit que viviremos del 23 al 27 de abril en Bogotá, es una oportunidad no solo para salir de la pantalla que se volvió extensión de nuestros cuerpos, sino para conectarnos con el oficio de la memoria, abrir esas cápsulas de tiempo en las que nos sumergimos durante horas en un tiempo pasado, una acción que ya fue, un concierto que no vimos, una figura que no conocimos de cerca, pero que nos marcó como el caso de Escalona; o un fenómeno del cual nos enamoramos por un disco, como el caso de C.Tangana con El Madrileño, pero que guarda una historia mucho más profunda hasta llegar a esa obra maestra. Incluso, en la era del meme, podemos conectar con el chiste escalado de Los Simpson de juntar a Cypress Hill con la Sinfónica de Londres que se hizo realidad después de muchos intentos. 


Salgan de la casa, consulten la programación y entérese de la oferta documental que tiene este año In-Edit en su regreso a Bogotá. Y conectemos con la historia, no para alimentar aquel cliché desgastado de no estar condenados a repetirla, sino todo lo contrario, beber de ella para recordar, reconocer, revisitar y revivir momentos que nos marcaron, y que a esos artistas retratados los hicieron parte de lo que son ahora, y que a nosotros nos ha servido para conocer íntimamente a estas figuras fueras de los escenarios, en su cotidianidad, como nunca los hemos visto. 


Consulta aquí abajo la programación y asegura tus entradas aquí.


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